'American Horror Story' redefine el papel de monja

Después de una larga espera (¡casi un año!) por fin llegó la muy esperada segunda temporada de ‘American Horror Story’, esa serie sobre terror y miedo que hace ver como juego de muñecas a cualquier cosa que haga Paranormal Activity.

Ryan Murphy ya nos había emocionado con pequeños cortitos así como el anuncio de que esta vez la historia sucedería en un manicomio; además supimos que actores y famosos de la talla de Adam Levine, Chloe Sevigny, Joseph Fiennes, Sarah Paulson, Zachary Quinto estarían presentes, uniéndose a la maravillosa ganadora del Emmy Jessica Lange, interpretando otro muy perturbador papel (como en la primera temporada, ¿recuerdan?).

Los que el año pasado vieron ‘American Horror Story’ saben que los creadores nos tiraron todo tipo de locura que les pudo salir de su cabeza; había enormes influencias diversas del cine -tanto dentro como fuera del terror-, bastante violencia y saltos de susto para considerar su nombre más que apto.

Sin embargo, conforme la serie avanzaba, nos entró una abrumadora sensación de que estaban quemando la historia por todos los extremos, seguido por la revelación de que la serie fue (y aparentemente siempre había sido) una antología. Esto es importante porque, si bien la temporada corrió a un ritmo vertiginoso durante 13 episodios, la audiencia quedó preguntándose cómo todo se uniría al final, y lo que significaría para el futuro de la serie.

'American Horror Story: Asylum' vuelve a América Latina


Los espectadores entraron a la historia sin saber que viendo una familia de muertos reuniéndose alrededor de un árbol de Navidad no sólo sería el final de la temporada, sino también el final de esa historia en particular.

¿De qué se trata la nueva historia?

Comienza en el presente con los recién casados  Leo (Adam Levine) y Theresa (Jenna Dewan-Tatum) que hacen una parada en Briarcliff, en medio de su gira por los lugares supuestamente embrujados en Estados Unidos. Después de un buen comienzo, las cosas rápidamente se vuelven amargas y los dos se ven enfrentados a una de las leyendas más entrañables de la institución con el asesino en serie Bloody Face. De ahí saltamos a la década de los 60 con Jessica Lange interpretando a la Hermana Jude, una monja tiránica con extrañas fantasías sexuales que supervisa un manicomio llamado Briarcliff.

El asilo fue construido originalmente como hospital de tuberculosis a principios del siglo 20 y fue el escenario de 46 mil muertes. La hermana Jude es una versión exagerada de las muchas pesadillas que tienen los ex alumnos católicos, pero su arma de elección no es el pellizco de monjita, sino una caña que utiliza para golpear a los reclusos rebeldes y subordinados desobedientes.

Entre los personajes actuales están Kit Walker (Evan Peters, de la primera temporada), quien es acusado de ser el asesino serial Bloody Face, la reportera Lana Winters (Sarah Paulson), que llega al asilo para supuestamente hacer un reportaje sobre su panadería (que dicen es legendaria), pero en realidad espera conseguir una entrevista con el famoso asesino; Grace (Lizzie Brocheré), una joven que se hace amiga de Lana y Kit, y la sexualmente insaciable Shelley (Chloë Sevigny de ‘Big Love’).

'American Horror Story: Asylum' en la red

¿Qué nos gusta?


Con el episodio de estreno, lo primero que la mayoría de los televidentes podrán observar es cómo los escritores han optado por mostrar su locura de una forma mucho más controlada. Esto no quiere decir que la serie de repente ha aprendido buenos modales, o se molestó en buscar la definición de la palabra "sutil", pero sí se siente esta idea de que todos ya le entramos a la broma, todo el mundo capta ahora que los escritores tienen un final claro, y que pueden explotar esta historia durante cierto número de capítulos ya sabiendo que hay una fecha de término.

Esto le da una fortaleza a Ryan Murphy bastante inusual, pues el creador es conocido por perderse dentro de sus mismas historias de tal manera que sentimos que sus historias empiezan a perder sentido. Si alguno de ustedes vio ‘Nip/Tuck’ o ‘Glee’ saben perfectamente de qué estoy hablando.

Entre la locura de la historia, lo sádico y un gran elenco escupiendo fabulosos diálogos (sin mencionar a Lange, una vez más es sublime en su papel) es difícil no estar entretenido viendo ‘Asylum’. Rara vez el terror había sido tan divertido (mínimo intencionalmente).

¿Qué no podría funcionar?   
Si no fuiste fan de la primera temporada, te aburriste o simplemente mucha sangre y muertes no es lo tuyo, ni siquiera lo intentes: ‘American Horror Story’ está dirigida para cierto público que disfruta viendo todas las secuelas de ‘Saw’ o al hermoso Adam Levine, pero si no eres de ellos la historia se te hará demasiado repetitiva y te cansarás rápidamente.